La kinesiología en tiempos de pandemia
La atención de la salud en general se ha visto afectada en estos meses por el aislamiento debido a la pandemia del COVID19. En el caso de la kinesiología, no ha quedado exenta de estas limitaciones teniendo en cuenta que es una disciplina que trabaja en contacto con el paciente. La Kinesióloga Selva Lifschitz comenta como se ha comenzado nuevamente con la atención en su profesión. » Hemos retomado la actividad desde la fecha que nos han habilitado oficialmente. Hacemos consultorio, trabajamos con fisioterapia que es todo lo que se conoce como aparatos, rehabilitación, posturología de osteopatía, todos los servicios ahora obviamente en menor horario. En estos tiempos hay que tener muchos más cuidados de los que se tenía anteriormente, siempre hay que ser muy cuidadoso con la higiene cuando hablamos de salud pero ahora son muchos los cuidados entre la limpieza del espacio físico, todos los recaudos de barreras que hay que tener «.
La tarea del kinesiólogo tiene que ver estrecho con el contacto con el cuerpo y se continúa trabajando para que la gente no pierda su proceso terapéutico. Se trabaja con elemento de protección extremando la limpieza con mayores productos, la ventilación de los consultorios, los turnos son más espaciados, evitar que se acumulen personas en sala de espera por el aislamiento social necesario.
«Todos los cuidados están extremados pero estamos trabajando con nuestros pacientes. Una rehabilitación o un pos quirúrgico no se pueden suspender, muchas veces el éxito de una cirugía está justamente por el pos operatorio y si no se siguen los pasos necesarios es difícil». Con respecto a las personas que por estar mucho tiempo en la casa con estrés o con tareas por ejemplo con la computadora, tienen contracturas y con dolores, la kinesióloga Lifschitz comenta «Hay pacientes, los que están doloridos, los que tienen un problema muy agudo, van al consultorio. Estoy teniendo muchos más pacientes con problemas de articulación témporomaxilar, están viniendo muchos con mareos y con vértigos que son patologías que están muy asociadas al estrés, a las malas posturas, a todo el tema del tele- trabajo que se hace ahora, eso es lo veo en mi consultorio. Después están los pacientes que tienen patologías crónicas con algunos cuadros agudos que sí o sí van y están también los pacientes que tienen mucha reticencia a salir de sus domicilios, con ellos ya no podemos hacer nada. La parte de kinesiología está trabajando mucho y tenemos distintos turnos, el paciente que necesita una atención la tiene».
» Nosotros pasamos muchísimas horas adentro así que le ponemos mucho cariño y mucho cuidado. Una cosa va de la mano con otra, entonces creo que este es un momento en que el profesionalismo con que uno se maneja, más allá de tratar de tener conocimientos, la parte de humana muy importantes y brindar la confianza al paciente me parece que es básico».