Quemaduras con vapor y agua caliente en el hogar
Uno de los accidentes más comunes en el hogar son las quemaduras con vapor y agua caliente al realizar algunas tareas cotidianas.
Existen diferentes tipos de quemaduras de acuerdo a la profundidad de las mismas: quemaduras de primer grado hasta tercer grado que es el nivel más severo y donde se pueden afectar los tejidos profundos como los músculos y nervios.
Las áreas del cuerpo más afectadas por este tipo de quemaduras suelen ser los brazos y las manos con un 42 % de incidencia, mientras que en segundo lugar se encuentran los pies y las piernas.
Síntomas de las quemaduras por vapor y agua caliente
Los síntomas varían de acuerdo a la profundidad de la quemadura. Aparecerá dolor o ardor en la zona afectada, enrojecimiento y si causó una quemadura de segundo grado, aparecerán ampollas debido a que el calor penetró las capas más profundas de la piel.
En las quemaduras de tercer grado se pueden observar ampollas y zonas donde el tejido profundo se encuentra expuesto. Además, puede haber una limitación funcional del área afectada
Recomendaciones de primeros auxilios para las quemaduras por vapor y agua caliente
- Alejar a la persona de la fuente de calor y ponerla en un lugar seguro.
- Enfriar la herida. Lo mejor es sumergir la zona afectada en agua templada durante 20 minutos. Así se enfría el tejido y se evita que la quemadura progrese. Bajo ninguna circunstancia se debe aplicar hielo, ya que el frío puede causar más daño.
- Retirar cualquier prenda de ropa que esté en contacto con el área afectada. Lo ideal es cortar la prenda para evitar algún daño. Si por algún motivo la ropa está adherida a la piel, no se deberá retirar.
- Cubrir la superficie afectada, convenientemente humedeciendo una gasa estéril o un paño. Si el área quemada no es muy extensa, se puede hacer un vendaje que no comprima tanto la extremidad para brindar más protección.
- No reventar ampollas ni aplicar sustancias sobre la quemadura. Este procedimiento solo debe ser realizado por personal médico en caso de ser necesario.
En la mayoría de las ocasiones, las quemaduras por vapor y agua caliente son de primer o segundo grado y para aliviar el dolor y las molestias producidas, después de aplicar los primeros auxilios, se usan remedios caseros como el aloe vera, cuya capacidad antiinflamatoria y antiséptica es útil para aliviar el dolor; la miel que permite desinfectar y reducir la retención de líquidos a nivel cutáneo o bolsas de té que es común su uso para disminuir el ardor.
Si el área afectada es muy grande o si se trata de una quemadura de tercer grado es necesario y recomendable acudir al médico.