Médico clínico para pacientes con lupus

Hace pocos días participamos de una jornada para pacientes con lupus y sus familias que tuvo lugar en el SUM del Hospital Escuela Ramón Madariaga. La organización es tuvo a cargo del Área de Reumatología del Hospital Escuela de Agudos “Dr. Ramón Madariaga”, junto al grupo Lupus Misiones. La convocatoria fue muy participativa, con varias ponencias.
El lupus es una de las consultas más habituales en el área de reumatología del hospital. Es autoinmune, frecuente en nuestra zona. Puede afectar a diferentes órganos, como riñón, piel, las articulaciones.
Durante las disertaciones, las médicas especialistas abarcaron distintos aspectos de la enfermedad. La Dra. Vanesa Paris, reumatóloga, mencionó durante su exposición que el paciente con lupus tiene que tener un médico clínico.
Luego de la charla, la interrogamos sobre ese punto.
«Es muy importante que la persona con lupus tenga un médico clínico de cabecera ya que también puede tener otras comorbilidades como problemas cardíacos, presión alta, infecciones urinarias, cuadros respiratorios, gripes, registros altos de glucemia, entre otros.
Muchas veces no pueden acceder tan rápido a la consulta con el reumatólogo, entonces demoran la atención de esa patología. Un médico clínico se encarga de ese tipo de cuestión y nosotros los reumatólogos nos ocupamos más de lo que sea el cuidado de la enfermedad, de mantenerlo en remisión o de hacer un ajuste de tratamiento.
Del mismo modo, en el caso de tratarse de un niño, el médico va a ser el encargado de hacerle ciertos estudios de específicos para arribar rápidamente a un diagnóstico y derivar al especialista.
Nosotros tenemos en el Hospital Madariaga un equipo de atención multidisciplinario, donde trabajamos mano a mano con otros especialistas como dermatólogo, nefrólogo, neurólogo y los clínicos también».
Como especialista, qué diría al paciente con lupus y a la familia?
«La verdad es que se puede vivir con lupus. El tratamiento actual no es el mismo que hace 20 años, tenemos muchas opciones.. Es importante la adherencia al tratamiento y asistir a los controles porque hoy el paciente con lupus puede hacer su vida normal. Igualmente es bueno recalcar que ningún paciente es igual a otro. Algunos tienen patologías muy leves y otros que son casos más graves, eso hace que los tratamientos sean diferentes y e incluso el seguimiento puede ser distinto. A un paciente grave hay que controlar con mucha más frecuencia, pero tenemos múltiples opciones de tratamientos actualmente. En esos aspectos se ha mejorado y cambió mucho la calidad de vida de los pacientes».