6 de octubre de 2024

Descubren en el cerebro el motivo del aumento del apetito

Alimentos ricos en grasa generan una inflamación en el hipotálamo, la cual aumenta el apetito a niveles que provocan el consumo excesivo de alimentos, conduciendo al aumento de peso

Investigadores de la Universidad Memorial de Terranova, en Canadá, indicaron que existe una relación entre la inflamación del hipotálamo, una parte del cerebro que regula el balance de energía y la sensación de hambre, y el consumo de dietas altas en grasa.

En un estudio reciente publicado en la revista PNAS, el equipo encabezado por Michiru Hirasawa, detalla  la relación entre la inflamación del hipotálamo, una parte crucial del cerebro que regula el equilibrio energético y nuestra sensación de hambre, y la ingesta de dietas altas en grasas.

Alimentos ricos en grasa y azúcar

La abundancia de alimentos sabrosos y ricos en grasa o azúcar ha propiciado que haya más personas longevas, pero también ha provocado una epidemia de enfermedades asociadas a la obesidad, que genera mala salud y pone a prueba la resistencia de los sistemas sanitarios.

Una de las vías para poner freno a esta crisis sanitaria está en el estudio de lo que sucede en el cerebro cuando nos exponemos a determinados alimentos.

Desde hace tiempo, se sabe que las dietas con mucha grasa pueden dar lugar a un círculo vicioso difícil de detener.

Esos alimentos producen una inflamación del hipotálamo que incrementa el apetito hasta niveles que nos hacen comer más de lo que necesitamos y que ganemos peso.

Sin embargo, los científicos también han observado un efecto aparentemente paradójico. La inflamación de esa región del cerebro también se asocia con enfermedades como la anorexia y otras que producen pérdida de peso.

Los investigadores utilizaron modelos animales para encontrar cómo se regula esa relación entre la inflamación y un apetito desordenado. Para ello probaron modificando genéticamente a los ratones que participaron en el estudio, les eliminaban los receptores de esta prostaglandina en las neuronas MHC, y los animales quedaban protegidos frente a la obesidad o el hígado graso que provocaba la inflamación del hipotálamo vinculada por una dieta con mucha grasa.