La atención psiquiátrica para niños y adolescentes
Abordar la atención psiquiátrica para los niños y adolescentes resulta difícil muchas veces. La salud mental funciona como un estigma que cuesta tratar, especialmente con los menores.
Los psiquiatras infantojuveniles son médicos que se ocupan de atender trastornos y problemas de salud en la infancia y adolescencia.
Existen varios signos que advierten cuando un menor necesita atención psiquiátrica.
Para conocer y aprender, entrevistamos a la Dra. Jacqueline Wabeke Vigo, médica posadeña, especialista en psiquiatría infantojuvenil. Atiende en el Hospital de Pediatría Dr. Fernando Barreyro y en el CEFAP de Posadas.
«La psiquiatría infantojuvenil abarca la etapa de la infancia y de la adolescencia. A partir de los 3 ó 4 años se puede atender a un niño. Las patologías más frecuentes en los niños suelen ser los trastornos de ansiedad o los trastornos del desarrollo, de déficit de atención TDAH; los trastornos de conducta como el trastorno oposicionista desafiante. En los adolescentes las alteraciones del estado de ánimo, ansiedad y depresión. Veo bastantes cuestiones de auto injuria es decir chicos que se cortan, se lastiman».
Se advierte cuando un chico tiene problemas?
«En los menores, el familiar o el docente que lo atiende advierte que ese chiquito puede tener un problema psíquico. Se nota en la escuela que hay falta de adquisición de pautas madurativas, dificultades cognitivas o que existe mala relación con sus compañeros. Los niños se tornan agresivos, tienen conductas violentas, otros son hiperactivos».
Cómo llegan a ustedes los pacientes?
«La escuela suele enviar primero a consulta psicopedagógica que evalúa y luego puede pasar al psicólogo. Posteriormente al psiquiatra si es necesario. Es un camino donde psicólogo y psiquiatra actúan juntos. Si hay algo muy disruptivo o que asuste directamente puede concurrir en primera instancia con el psiquiatra».
En los hogares, es posible que la familia note en el infante o adolescente trastornos de conducta. Por ejemplo que se aísle porque no quiere ir a la escuela, que tenga pensamientos de que alguien lo sigue.
«Esos serían los trastornos psicóticos que también se despiertan de niño, cuando hay una falta de contacto con la realidad.
Primero se debe descartar que no haya alguna cuestión orgánica funcional, por ejemplo neurológica.
Se pide un laboratorio completo, un electroencefalograma para ver si hay focos de paroxismo, convulsiones o epilepsia, una tomografía con una resonancia para cerebral para ver si hay alguna lesión».
Son varios los motivos de consulta….
«En ambos grupos también se ven trastornos por uso de sustancias. En la guardia se suelen recibir casos de intento de suicidio, ataques de pánico, episodios conversivos que son por ejemplo desmayos que no llegan a ser desmayos, lo que antes se denominaba histeria. Se consulta bastante por anorexia, labilidad efectiva, abuso sexual infantil».
Muchos casos se derivan al psiquiatra desde la internación en diversos servicios donde los pediatras atienden a los niños. Se consulta al médico psiquiatra cuando consideran que ese chico internado necesita otra forma de apoyo.
Cómo es la primera evaluación del niño y del adolescente?
«La primera entrevista la llevo a cabo con los padres para saber por qué traen al hijo o a la hija. Cuáles son los síntomas o la dificultad que encuentran ellos, cuánto tiempo hace que está sucediendo. Siempre es importante conocer los antecedentes de desarrollo, también familiar por alguna patología psiquiátrica.
Luego la entrevista de los chicos más chicos suele ser en presencia de los padres y a partir de los 13 años más o menos, a solas porque es la etapa de la adolescencia dónde hay más pudor».
Ustedes medican?
La medicación psiquiátrica está avalada también para el uso infantil.
Cuáles son los casos donde cuesta un poco más el tratamiento o lleva más tiempo?
«Depende de la medicación. Si está indicada para tal patología y en algún paciente puede no resultar. Ahí es donde encuentro dificultad, también en niños y adolescentes con problemas de consumo. He recibido varios pacientes del interior que están en un contexto desfavorable, consumen y requieren desintoxicación. También llegan chicos que viven en hogares de niños y que tienen problemas con las drogas».
La Dra. Wabeke Vigo describe situaciones de pacientes que se lastiman porque quieren sentir algo o para dejar de sentir situaciones como las peleas que tienen con los padres, prefieren el dolor como vía de escape.
«La atención es más eficaz cuando es en conjunto con un psicólogo. Si la demanda en psiquiatría es mucha y el tiempo es reducido, es importante que el paciente tenga su espacio de psicoterapia semanal. Yo usualmente veo a los pacientes una vez al mes para control. Luego de ya estar diagnosticados y con tratamiento».
Las familias aceptan ir a la consulta?
«Hay de todo. Personas que entienden que algo malo está pasando que el niño no está bien. Algunos padres exigen un tratamiento farmacológico aunque quizá el caso no lo requiera; otros avisan de entrada que su hijo no va a tomar ninguna medicación aunque sea lo indicado.
Ir a la consulta con el psiquiatra puede ser un prejuicio, un concepto mal concebido, quizá desde la ignorancia. A veces un chico dice hace rato que le pedí a mi mamá que me lleve. Los padres se resisten, les da miedo o tienen la dificultad de aceptar que hay un problema con el menor».
Son pocos los médicos que eligen esta especialidad….
«La psiquiatría infantojuvenil es un desafío por todo lo que implica tratar niños y adolescentes. Es una tarea interdisciplinaria. Diría que lo importante es consultar, no tener temor y que bienvenido sea el tratamiento cuando es necesario».