La epidemia de este siglo es la obesidad

Todos los días vemos cantidad de personas caminando por las avenidas con vestimenta deportiva, cada día se habilitan más gimnasios en la ciudad, muchos concurren a clases de diversos bailes, encontramos más negocios que venden productos naturales, las ferias de frutas y verduras son muy c oncurridas . Podemos pensar que aumentan las prácticas de vida sana. Y sin embargo una frase nos sorprende.
«La epidemia de este siglo es la obesidad».
Con estas palabras comienza el Dr. Marcelo Saidel, médico clínico con amplia formación y experiencia.
Su primera frase nos impacta aunque la conozcamos y tengamos idea sobre los riesgos de estar pasados de peso. Lo atendible y esperanzador es que nos explica las posibilidades que la medicina ofrece para bajar de peso.
«La epidemia de este siglo son el sobrepeso y la obesidad. La gente cada vez está más sedentaria con todo lo que trae implicado, la obesidad, la morbilidad, el riesgo cardiovascular sobre todo. Esas personas tienen más prevalencia de enfermedades cardiovasculares y diabetes. Es mayor el riesgo o la posibilidad de padecer eventos cardiovasculares y cerebrovasculares, porque con la diabetes son pacientes cada vez más propensos a tener presión alta y trastornos de lipídidos, más hígado graso también».
La obesidad hace que todo se vaya complicando y aumentando el riesgo.
Cómo resolvemos la obesidad?
«Siempre digo que está muy en boga el tema de las cirugías bariátricas, donde se opera el estómago pero no operan el cerebro. Creo que hay que apuntar un poquito más a la parte de salud mental, hacer una buena valoración de los pacientes, si se pueden beneficiar con una cirugía o no».
Y los medicamentos para bajar de peso?
«Ahora salieron ciertas drogas que se utilizan para la diabetes que se están empleando en pacientes no diabéticos, con obesidad. Uno de los mecanismos es actuar sobre el centro de la saciedad, el centro del hambre. Obviamente se pueden bajar 15 kilos, 20 kilos como máximo, con la ayuda de psicoterapia y también haciendo actividad física, o sea todo un conjunto de cosas. Cambiar el estilo de vida».
Cómo es esa nueva medicación?
«Hay dos grandes grupos. Uno es el bupropión que actúa más en gente que tenga ciertos trastornos de la ansiedad. A los que picotean los alimentos, tienen antojos de comida, se le puede dar ese tipo de medicación. Y para los que tienen mucho sobrepeso, ya con algunos trastornos glucémicos, de lípidos, es mejor utilizar las drogas que están ahora como la agonista GLP 1. La Saxenda y Liraglutida son medicamentos autorizados para obesidad y diabetes acá en Argentina. Tenemos la dosis como antidiabético y para la obesidad, son diferentes dosis».
Es la epidemia de este siglo la obesidad, pero por otro lado se ve que cada vez hay mayor difusión sobre vida sana, que la gente camina, va al gimnasio, hace dietas, come más verduras.
«Muchas veces uno cree que come más sano pero no siempre consulta con el nutricionista para tener una educación nutricional. Si vas a la modista porque la camisa te va un poquito más chica en el cuello o el largo de los brazos, lo mismo pasa con la nutrición. Puede depender de la patología, de lo que a uno le gusta comer, para confeccionar una dieta adecuada. Cuando digo dieta, es tener en cuenta porcentajes de consumo de hidratos de carbono, de proteínas y de lípidos. No es solamente comer determinada dieta, es buscar el equilibrio».
No es por la cuestión social de la obesidad, sino por todo lo que implica el obeso. Son personas que tienen depresión o trastornos de ansiedad, del ánimo, es un conjunto de cosas.
No es tan sacrificado ir al médico. Existen un montón de alternativas para hacer tratamientos.
«A mí me parece que el pilar fundamental es trabajra con la evaluación psicológica, porque ahí radica todo.
Tratar de manejar esas ansiedades porque después vos podés ayudar un poco con fármacos pero hay que sostener en el tiempo. Cuando se hace el cambio de estilo de vida, uno trata de apuntalar todo eso, porque estamos hablando también de herramientas muy costosas que son estos fármacos nuevos que son de costos altos».
Las investigaciones continúan y van surgiendo nuevas drogas. Pero es fundamental el cuidado para no llegar a patologías complejas. La consulta médica a tiempo para prevenir y tener el diagnóstico adecuado es el camino indicado.