Clinofilia: cuando no se quiere salir de la cama
La clinofilia, también conocida como clinomanía, es una conducta que lleva a las personas a resistirse a levantarse de la cama y a pasar la mayor parte del tiempo acostadas. Aunque no es muy conocida, no es tan rara como podríamos pensar. Aunque no se asocia con una enfermedad orgánica evidente, su impacto en la calidad de vida de quienes la experimentan merece una exploración más profunda.
Síntomas y causas de la clinofilia
Identificar la clinofilia va más allá de querer descansar después de una semana agotadora. Los síntomas incluyen tristeza, desmotivación, sentimientos de culpa, y problemas en el trabajo o familiares. Quienes la padecen suelen querer estar solos, experimentan cambios de humor frecuentes. El insomnio es común debido a la falta de actividad física, generando un intenso malestar emocional.
Las causas suelen estar ligadas a problemas psicológicos, como la depresión, el duelo, el estrés, la ansiedad social o incluso trastornos del sueño no diagnosticados. En momentos difíciles, la cama se convierte en un refugio para aislarse del mundo.
Es fundamental comprender que la clinofilia no es simplemente una elección, sino más bien un síntoma de problemas subyacentes que afectan la salud mental de la persona.
Tratamiento
La clinofilia puede tratarse mediante terapia psicológica conductual, que incluye cambios de creencias y estrategias para afrontar la situación. El objetivo es ayudar al paciente a reincorporarse a la vida diaria, incorporando actividades y cambiando perspectivas para enfrentar los problemas. La clave está en gradualmente recuperar la normalidad y dejar de ver el entorno como hostil.