Podemos acabar con la tuberculosis

El 24 de marzo se recordó el Día de la Tuberculosis, fecha que marca el día que en 1882 el Dr. Robert Koch anunció el descubrimiento del bacilo causante de tuberculosis, dándonos la primera herramienta para combatirlo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en 2021, a nivel mundial, 1.2 millones de niños menores de 15 años se enfermaron de tuberculosis. Corresponden 8000 a la región de las Américas.
Entre el número de casos que se estima enfermaron y el número de casos que fueron diagnosticados, existe una brecha que es mayor en los más pequeños. Esto se debe principalmente a las dificultades que presenta el diagnóstico en la edad pediátrica.
Es importante entonces estar alerta ante la posibilidad de un caso de tuberculosis, tanto el equipo de salud para solicitar los estudios correspondientes, como la comunidad para realizar la consulta.
La tuberculosis es una enfermedad curable y prevenible con un alto éxito de tratamiento sobre todo cuando se diagnostica en los estadios iniciales. Pero también puede ser fatal o causante de importantes secuelas en los estadios más avanzados.
La situación pandémica provocó que muchas personas no fueran diagnosticadas y tratadas durante el año 2020 prolongando así el tiempo de transmisión a su alrededor. Esto se ve reflejado en el importante aumento de casos que se detectaron en los menores de 15 años durante el año 2022, un 70% más que en el año 2021.
La tuberculosis en la niñez es llamada un evento centinela porque es la manifestación de una circulación activa del bacilo en la comunidad.
También se observó en este período un aumento de las defunciones de mayor magnitud en menores de 15 años. Siendo todas estas prevenibles, es primordial focalizar en estrategias que permitan el diagnostico precoz y tratamiento oportuno.
Avances en la prevención
En los últimos años las herramientas disponibles para la detección, la prevención y el tratamiento han mejorado.
Se dispone de métodos diagnósticos más sensibles y de esquemas preventivos y de tratamiento de la enfermedad más cortos. Se espera poder contar pronto con nuevas vacunas.
En 2022 había 16 posibles candidatos en ensayos clínicos, cuatro de ellos en fase III de investigación.
Actualmente la única disponible es la BCG que debe colocarse en los recién nacidos y cuya protección es principalmente contra las formas graves y diseminadas de la enfermedad.
Este año el lema de la OMS para el día de la tuberculosis es: ¡Sí! Podemos acabar con la tuberculosis.
Los enormes esfuerzos en materia de manejo sanitario que se han realizado para enfrentar la pandemia por COVID-19 muestran que podemos lograr importantes y rápidos avances cuando existe la decisión.
Fuente: Comité Nacional de Neumonología de la SAP