Los cinco ritos tibetanos para tener flexibilidad y juventud

Llegados desde el Tibet, son una serie de ejercicios físicos que se practican para mejorar la salud y el bienestar.
Se trata de una tradición ancestral que se ha mantenido durante más de 2500 años y que tiene efectos positivos en el cuerpo y la mente.
UN ESTADO OPTIMO DE BIENESTAR Y RELAJACION
Consisten en una serie de posturas con las que aumenta la luminosidad en la piel e incluso se combaten enfermedades reumáticas como la artritis.
En 1939, el escritor Peter Kelder publicó un libro titulado The Eye of Revelation (El ojo de la revelación), en cuyas páginas contaba como, tras un viaje por el sistema de los Himalayas, aprendió una serie de movimientos con los que alcanzar la eterna juventud.
Se trataba de cinco ritos tibetanos que, practicados con regularidad, tenían consecuencias positivas en el rejuvenecimiento del organismo y la positividad mental, además de ayudar a equilibrar los centros de energía o chakras.
Si se practican los ejercicios de manera regular, los beneficios que se prometen pasan desde notar una mayor luminosidad en la piel, disminuir la apariencia de las arrugas o la intensidad de dolores crónicos, hasta mejorar el estado de ánimo e incluso fortalecer la musculatura y potenciar la flexibilidad.
Los cinco ritos tibetanos son: El Derviche, El Levantamiento de piernas, El Arco, El Puente, El Perro.
Para practicar los cinco ritos tibetanos, se recomienda:
concentrarse en la respiración adecuada
repetir el ejercicio entre 3 y 21 veces
aumentar gradualmente el número de repeticiones
practicarlos regularmente.
Algunos de los beneficios de los cinco ritos tibetanos son:
- Mejorar la respiración
- Fortalecer los músculos
- Aumentar la flexibilidad
- Mejorar el equilibrio
- Tonificar el cuerpo
- Desarrollar la concentración
- Alcanzar la conciencia plena
- Ofrecer un estado óptimo de bienestar y relajación